Tocar fondo, pararse a pensar. Dejar de envenenarse, de adulterarse. Pedir al crupier que te saque de la ronda. A veces cambiarse al barrio de enfrente es suficiente distancia, simplemente la justa. Más cuando no se trata de cambiarse, sino de volver.
No es tan sencillo, cambiarse de barrio es un hecho fisico,tangible. Las mudanzas de verdad son diferentes, son otra cosa. Hay veces en las que no se puede simplemente volver.
6 comentarios:
Hola, srta. Pérez, hacía mucho que no te blogeaba. Veo que sigues en la misma línea. Espero que vaya todo bien. Un beso fantasma.
Ojalá que todo me fuera bien,sí, pero me estoy consumiendo y agotando a marchas agigantadas. Eso es todo...
Srta. Pérez o Lady drama.
Madrid quema, date un paseo o un respiro.
Tocar fondo, pararse a pensar. Dejar de envenenarse, de adulterarse. Pedir al crupier que te saque de la ronda. A veces cambiarse al barrio de enfrente es suficiente distancia, simplemente la justa. Más cuando no se trata de cambiarse, sino de volver.
No es tan sencillo, cambiarse de barrio es un hecho fisico,tangible. Las mudanzas de verdad son diferentes, son otra cosa. Hay veces en las que no se puede simplemente volver.
Puede que al fin haya logrado una mudanza en toda regla. Aunque quién sabe qué ocurrirá mañana. Ya sabes, un día arriba,doscientos abajo.
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